La oferta de modelos “ecológicos” va creciendo y Renault suma al Megane E-Tech al tope de la gama. Un eléctrico de calidad con buenas prestaciones.
1 – Cuando Renault presentó, allá por los 90, la familia de modelos Megane se podía intuir que iba a marcar una época. Los años y el éxito en ventas confirmaron esa presunción. La evolución tecnológica lo convierte hoy en uno de los principales exponente de la avanzada eléctrica de la marca. Importado desde Francia, se lanzó en un mercado argentino que tiene una incipiente oferta de este tipo de vehículos, pero va en crecimiento.
2 – Su diseño llama la atención. Es moderno, futurista, pero a su vez elegante y sobrio. Las llantas tienen un diseño llamativo. Renault siempre se caracterizó en marcar tendencias estéticas y este Megane va camino a eso. Técnicamente, es un crossover, el camino intermedio entre un hatch y un SUV. Según los ojos del observador, puede tener más de uno que de otro. Es bajo, con poco despeje del suelo y compacto.
3 – El interior mantiene ese concepto de mostrar modernidad, pero con el límite claro de no ser shockeante. Tiene trazos simples y delicados. Ofrece toda la sensación de estar en un auto tecnológico, aunque lo presenta de forma sutil. No lo grita. El tablero digital de 12 pulgadas junto a la pantalla multimedia táctil de 9 pulgadas, consolidan el carácter “tech”. El resto está definido por la calidad y elegancia. Es un auto francés, hecho en Francia. Muy buenos materiales y terminaciones. Butacas cómodas, tapizadas en tela reciclada. Es espacioso y luminoso, pese a no tener techo panorámico. Con los ajustes de butaca y volante, se puede elegir una posición de manejo confortable. El espacio para los pasajeros que viajen en las plazas traseras es generoso.
4 – Se ofrece en una única versión – EV60 – con un motor eléctrico que desarrolla 220 caballos de potencia alimentado por una batería de 60 kWh.
5 – El andar del Megane E-Tech es uno de los puntos fuertes del modelo. Es muy ágil y confortable de manejar. Obviamente, es silencioso como todo eléctrico. Con los 200 caballos del motor, su potencia se siente cuando se lo pisa desde cero. Sale rápido y firme. Se mueve en la ciudad con comodidad, con una dirección que trabaja en forma precisa. La suspensión neutraliza de forma efciente las irregularidades de las calles.
6 – La buena respuesta en el ámbito urbano se repite en ruta o autopistas. Cuando se lo pisa, se confirma que se está en un auto potente. Necesita poco más de 7 segundos para ir de 0 a 100 km/h y la misma respuesta se obtiene cuando se hacen maniobras de sobrepaso. Su baja altura y la suspensión equilibrada lo hacen un vehículo estable a altas velocidades y en curvas. No está pensado como un deportivo, pero tiene respuestas que están acorde a un modelo de este tipo. Cuenta con tres modos de manejo: Eco, Confort y Sport. Se nota la diferencia de potencia en cada uno.
7 – El tema clave de los vehículos eléctricos pasa por la autonomía. Según Renault, con una carga completa se pueden recorrer unos 450 kilómetros. Es posible, pero en condiciones muy especiales. En el manejo normal, se acerca más a los 400 kilómetros. Es un buen número para un eléctrico. Permite un buen recorrido diario y hasta salir a la ruta, a destinos cercanos, sin problema. En cuanto a la carga, vale la pena reiterar las distintas formas que existen. Quien compra un vehículo como este, se instalará en su domicilio un cargador hogareño. El Megane cuenta a su favor con una batería con buena potencia de carga (entre las mejores) de 22kw con corriente alterna y 130 kw en continua. Esto permite reducir los tiempos de carga. Con el cargador hogareño, se puede recuperar la carga en dos o tres horas. Cualquier eléctrico, requiere una cambio de hábito. Hay que acostumbrarse a enchufarlo cuando se llega a la casa o durante la noche para tenerlo siempre listo. Como el teléfono celular. En un cargador rápido, como muchos de los instalados en lugares públicos (shoppings, supermercados, restaurantes o estaciones de servicio), se puede recuperar la carga en media hora, mientras se hace las compras o se toma una café. También está la posibilidad de cargarlo en un tomacorriente normal de domicilio. Esa fue la forma de hacerlo en esta oportunidad. La gente de ChargeBox facilitó un cargador de emergencia que se conecta a cualquier enchufe. En este caso, la carga es muy lenta, Puede llevar varias horas recuperar la carga perdida durante el día, pero se puede dejar enchufado toda una noche y a la mañana siguiente tener el auto listo para salir.
8 – El equipamiento de seguridad es muy completo. Desde los siete airbags que ofrece hasta una larga lista de sistemas de asistencia a la conducción. Detector de fatiga, mantenimiento de carril, freno autónomo de emergencia y muchos más.
9 – En el tema de confort, como sucede ya con muchos modelos de este nivel de gama, no cuenta con rueda de auxilio. Un ítem que puede ser una incomodidad en caso de pinchadura y ni hablar de rotura. Por otro lado, es muy bueno el sistema del espejo retrovisor central que reproduce la imagen que capta la cámara de retroceso. Una vez que se acostumbra a su uso, es un punto a favor.
10 – La garantía del auto es de tres años o 100.000 km y de 8 años o 120.000 km para la batería. El precio es de $71.000.000. Es un valor muy alto y por arriba de lo que se vende en otros mercados. En Europa vale u$s31.000. Esto tiene que ver con la alta carga fiscal que soportan los 0km en la Argentina, agravada en este caso porque está castigado con el impuesto al “lujo”.