La marca china JAC presentó ayer su modelo JS8 PRO, un SUV de siete plazas con un precio al público de u$s39.300 (Ver nota). En Chile, se vende en dos versiones que cuestan u$s19.700 y u$s21.500. Siempre puede haber diferencia de equipamiento en cada país, pero estos valores son una buena referencia.
Tomando la opción más cara, la diferencia con el precio que se comercializa en la Argentina es grande.
Chile es un mercado con una economía muy abierta y baja presión impositiva, donde no se producen vehículos, mientras que la Argentina está lejos de ese modelo.
Desde la asociación que agrupa a las terminales locales (ADEFA), hace unos años, se elaboró un informe que señalaba que el 54% del valor que paga un consumidor por un 0km son impuestos. Es un dato aproximado ya que hay muchas variables como el origen del vehículo (si es Mercosur o extrazona), el segmento (las pickups pagan la mitad de IVA que un coche) o si está alcanzando por el Impuesto Interno.
Por eso, ese 54% es un valor de referencia y en base a un vehículo de producción nacional.
Ante la disparidad de precio de este JAC respecto al valor de Chile, ARodarPost consultó a la empresa para saber cuál era la carga impositiva de este modelo.
Según la información suministrada, el JS8 PRO paga u$s6.821 de IVA, u$s1.068 de IIBB, u$s 273 de Débito-Crédito, u$s5.539 de derechos de importación (35%) y u$s475 de Tasa de Estadística (3%).
En total, suman u$s14.176, lo que representa el 36,07% del precio al público del auto.
Desde las terminales locales explican que ese 54% de referencia corre para los autos de producción nacional y que acumula toda una cadena de impuestos en el proceso productivo que van aumentando la presión fiscal final.
Desde ADEFA se viene reclamando, desde hace tiempo, además de la reducción de impuestos, un cambio en la estructura tributaria para asimilarse al modelo mexicano. En ese país, que tiene una industria automotriz muy competitiva, la carga fiscal sólo se aplica a la comercialización de 0km. En la parte productiva no se cobra ningún impuesto.
Más allá de esta cuestión técnica sobre cómo se cobran los impuestos, México tiene menor carga fiscal general. Lo mismo sucede en Brasil y, obviamente, en Chile. En el país vecino, el derecho de importación de 6% y un IVA de 19%. A esto se suma un impuesto ´´verde´´ menor.
Para explicar cómo se llega al precio del modelo de JAC, se podría estimar que ingresa con un valor FOB de u$s15.000, sumarle el flete (alrededor de u$s1.000) y el seguro. Luego está el margen del importador (no la rentabilidad), que puede ser entre 10% y 15%, más el margen de la concesionaria, que también ronda entre 10% y 15%.
Vos fijate como la suma infernal de impuestos hace que la rentabilidad sea mayor porque los precios de los nacionales hacen que los importados tampoco se despeguen y sean mucho mas baratos