Volkswagen enfrenta 12 meses difíciles (pero hay luz al final del túnel)

Los últimos meses están siendo muy movidos para la industria automotriz local con noticias no del todo alentadoras.
La venta de Mercedes-Benz (Vans y autos), como adelantó, en primicia, ARodarPost, ya está en su tramo final (Ver nota)
Por otro lado, la situación de Nissan y su posible levantamiento fabril de la Argentina, como también anticipó este medio(Ver nota), es un tema a seguir de cerca en los próximos meses.
Pero hay otra automotriz que está  atravesando una etapa difícil, como es el caso de  Volkswagen.
También ARodarPost dio a conocer los cambios que se están dando en la terminal alemana.
Uno, el fin de la producción del SUV Taos y su inicio de importación desde México (Ver nota).
El otro, el Proyecto Patagonia, que consiste en la producción de una nueva pickup, de origen chino, en reemplazo de la Amarok (Ver nota)
Esto pone a la automotriz en un momento de muchos cambios internos, pero – a diferencia de lo otros casos  mencionados – todo indica que tendrá una resolución favorable, más allá de las consecuencias en materia laboral que está teniendo este proceso.
Es por eso que, los próximos meses (posiblemente hasta entrado 2026), van a ser desafiantes para la empresa.
Desde el año pasado, la automotriz viene realizando un importante ajuste de personal. Esto sigue adelante este año.
También acaba de implementar un programa de suspensiones que, según comentan internamente, va a ser prolongado. Cuentan que esos planes se van a ir revisando permanentemente, por lo que va cambiando su duración.
Todo esto para adecuar la plantilla de personal al futuro industrial de la compañía.
El fin de la producción de Taos está previsto para junio próximo (Ver nota)
Está claro que todo esto no es oficial porque la empresa, pese a las consultas periodísticas, no brindó ningún tipo de información al respecto
Sin embargo, ARodarPost cuenta con fuentes confiables que vienen suministrando datos precisos de lo que sucede dentro de Pacheco.
Según estas fuentes, también para junio se eliminaría el segundo turno de producción, por lo que la planta pasaría a trabajar en un sólo turno.
Esto explica la reducción de personal que viene realizando a través de retiros voluntarios, entre otras formas.
El objetivo es, además de adecuar el número de trabajadores a la actividad prevista para el corto y mediano plazo, lograr un «recambio generacional» del personal de la planta. Léase, sacar personal con muchos años, con problemas de ausentismo y más «politizado» sindicalmente.
La planta quedaría con la producción única de Amarok hasta la llegada de la pickup «china», que está prevista – como fecha más optimista, octubre de 2026.
Hoy la planta está produciendo a un promedio de 160 unidades por día de cada modelo (Taos y Amarok), según el plan previsto hasta mediados de año.
Una vez levantada la fabricación de Taos, la Amarok se seguirá fabricando a un ritmo de 140 unidades diarias, al  menos, hasta octubre que es, hasta hoy, donde está definido el programa de producción en marcha. Éste se va renovando mensualmente. 
Se estima que este año se van a fabricar unas 30.000 Amarok (el año pasado fabricaron 28.500 aproximadamente)
En 2026, se mantendrá la producción de esta pickup hasta empalmar con el Proyecto Patagonia.
De la pickup «china», lo que se sabe es que ya están empezando a cotizar piezas con algunos proveedores y se espera que en abril se comience a nominar a los autopartistas elegidos.
Este es un tema complicado ya que, se comenta, el nuevo modelo tendrá un nivel de integración bajo, al menos incialmente, por lo que algunos proveedores que hoy abastecen a Volkswagen en Taos y en Amarok perderán a la automotriz como cliente.
También hay mucha información poco clara sobre el volumen de producción previsto.
El número más ambicioso que se escucha entre proveedores es de 80.000 unidades anuales para 2027.
Aseguran que es una cifra exigente y que tendría que tener una alta proporción destinada a la exportación para ser posible.
Más allá de estos detalles, el tránsito de los próximos 12 meses para la marca alemana estará dominado por noticias de ajuste laboral e incetidumbre, aunque tienen un proyecto en marcha (se debería estar anunciando, de forma oficial, a la par de la salida de Taos) que permite aventurar que hay luz al final del túnel.