Los precios de los autos en la Argentina son siempre un tema polémico. La idea generalizada en la sociedad es que los vehículos 0km (y los usados) son caros.
Es difícil retrucar esa afirmación. También es cierto que, en períodos como el actual, esa posición se refuerza por la caída del poder adquisitivo de los ingresos de los argentinos.
De todas formas, el concepto no cambia ya que, más allá de los salarios devaluados, las comparaciones de precios con otro países dejan claro que, en la Argentina, los valores están dentro de los más altos.
Una de las causas de esta situación tiene que ver con la alta carga impositiva que existe y que impacta de pleno en el precio de un vehículo. El piso de la presión fiscal es de 54%, pero puede llegar a 70% o más en muchos modelos.
Si a esto se le suman los vaivenes cambiarios, la comparación con otros mercados puede ser muy dura.
Con un “blue” alto y una brecha cambiaria amplia, los precios se abaratan en relación a esa cotización.
Cuando el “blue” y la brecha se achica, se encarecen.
Esto es lo que viene sucediendo desde hace algunos meses y, especialmente, en los últimos días con el derrumbe de la cotización de cambio paralelo.
Por este motivo, hoy los 0km están más caros que hace poco tiempo.
Hay que aclarar que este no es un fenómeno puntual del sector automotor. Todos los bienes y productos se encarecieron en dólares en lo que va del año.
En julio, el “blue” llegó al techo de los $1.500, mientras que esta semana, para quien quiere vender billetes verdes, le pagan cerca de $1.100. Una diferencia grande.
Mientras tanto, los precios internos siguieron creciendo porque, aunque se está frenando, la inflación sigue existiendo.
Precios en Argentina
Con los aumentos de precios de noviembre, el auto más barato de la Argentina es el Fiat Mobi Trekking, que cuesta $19.550.000. Convertidos al “blue”, son 17.800 dólares.
Los otros cuatro modelos que completan el top five son el Toyota Yaris ($21.743.000), el Fiat Cronos ($22.268.000), el Citroën C3 ($22.290.000) y el Peugeot 208 ($23.080.000), en sus versiones de entrada de gama.
Pasados al dólar informal, los precios son 19.600, 20.060. 20.080 y 20.800 dólares, respectivamente.
Eso es lo que cuestan los 0km más baratos del mercado.
Precios en Brasil
Si se toman los cinco 0km más accesibles del mercado brasileño (con su real que se sigue devaluando), los precios son los siguientes: Fiat Mobi Like, u$s12.700; Renault Kwid Zen, u$s12.800; Citroën C3, u$s13.235; Peugeot 208, u$s13.253 y Fiat Argo, u$s14.790.
Entre el modelo más accesible de la Argentina y el de Brasil (los dos son Fiat Mobi) la diferencia es de u$s5.100. Para tener una idea más representativa, ese modelo es 28% más barato en Brasil o 40% más caro en la Argentina.
El mercado brasileño tiene bastantes semejanzas con el el argentino. Cuenta con fábricas radicadas, protección arancelaria y también elevada presión impositiva interna.
Precios en Chile
En el otro extremo se encuentra Chile, sin radicación de industrias, menor carga fiscal y muy bajo arancel de importación.
En ese mercado se da otra particularidad: hay una mayor competencia. Se estima que hay alrededor de 80 marcas que operan en ese país y una fuerte presencia de automotrices chinas.
Todo eso hace que los precios sean mucho más bajos.
Los cinco autos más baratos son el Suzuki Alto (u$s8.150), el Suzuki Presso (u$s 8.760), el Hyundai Grand i10 (u$s9.100), el Changan Alsvin (u$s9.100) y el Geely GX3 (u$s9680).
Para hacer la cuenta simple, el 0km más barato de Argentina cuesta más del doble que el más económico de Chile.
La suba de los precios internos en pesos y la baja del “blue” llevó a la relación de los valores de los autos en la Argentina respecto a los países vecinos a uno de los niveles de diferencia más extremos de los últimos tiempos.
(Agradecimiento a Amilcar Collante por la elaboración del cuadro de precios)