Con la llegada del actual Gobierno, la industria automotriz local está teniendo importantes cambios. La apertura económica y la baja de algunos impuestos establece nuevas reglas de juegos y fomenta la competencia.
Un mercado con mayor y mejor oferta parece ser el objetivo de la nueva gestión.
En el sector señalan a algunas medidas, aunque no parezcan de una trascendencia importante, como pasos para alcanzar esa meta, dentro de las posibilidades reglamentarias y citan, como ejemplo, uno de los últimos anuncios oficiales.
En septiembre de 2019 el gobierno de Mauricio Macri firmó el AC14 con Brasil (acuerdo de cooperación económica) que rige hasta el 2029.
Establece las reglas del comercio bilateral del sector, con un incremento del intercambio, pero sólo dentro del Mercosur. (Ver nota)
Con ese acuerdo, Brasil monopoliza el mercado argentino de autos porque limita con aranceles de 35% a las importaciones de los países centrales. Lo que se conoce como mercados de extrazona.
Actualmente, el 90% de las importaciones de vehículos ingresan desde Brasil, a pesar de que en ese país no se producen los autos con las tecnologías más avanzadas.
Para salir de este corsé comercial y abrir su mercado, la Argentina tendría que salir del Mercosur o convencer a Brasil de quitar las barreras arancelarias. Son dos alternativas de difícil implementación hoy por cuestiones políticas.
Sin embargo, según explican en el sector, el presidente Javier Milei sacó un conejo de la galera y encontró un vericueto con híbridos y eléctricos para que puedan ingresar vehículos de los grandes productores mundiales sin el 35% de arancel
El decreto 49/2025 permitirá la importación de 50.000 autos de última generación al mercado argentino.
Si bien es sólo el 10% de los 500.000 que se estima se patentarán este año, es un buen comienzo para el consumidor argentino.
Se espera que esta iniciativa tenga un impacto positivo en los precios (Ver nota), además de una mejora tecnológica en la oferta de vehículos.
Todavía la medida no está reglamentada. En estos días se está definiendo la forma de reparto de ese volumen de unidades.
Ese cupo se dividiría en partes iguales (el 50% para ADEFA y el otro 50% para CIDOA) a través de licitaciones que adjudicarán la cantidad de unidades a cada empresa en base a los modelos que ofrecen, tipo de tecnología y mejores precios.
La resolución reglamentaria saldría en los próximos días porque es intención del Gobierno de otorgar la primera parte del cupo durante marzo. La intención es apurar lo máximo posible la medida para que cuanto antes empiecen a llegar los nuevos modelos importados y le pongan un techo en el precio a la oferta de 0km qué hoy llega de Brasil.
El «conejo de la galera» que sacó Milei para que haya más competencia en el mercado automotor y que bajen los precios

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