Volkswagen redujo el ausentismo a la mitad en un año ¿Cómo lo hizo?

Horacio Alonso

Volkswagen realizó un encuentro con un grupo de periodistas para visitar la fábrica de General Pacheco y ver cómo está funcionando la línea de producción de Taos y la de la renovada Amarok, después de la inversión para el restyling.
Arodarpost participó de esa reunión y fue interesante porque se pudo acceder a datos importantes.
Por ejemplo, la planta está trabajando a un ritmo de 400 unidades por día, entre los dos modelos, con una capacidad instalada de 500 vehículos diarios en dos turnos.
Esto muestra que la actividad del establecimiento está en un nivel alto, en un contexto económico donde no todas las terminales pueden mostrar esa realidad.
Se habló mucho de cuestiones técnicas y del nivel de robotización en todo el proceso productivo.
Entre tanta información, hubo un dato que llamó la atención y tiene que ver con la fuerte baja del nivel de ausentismo que logró la automotriz respecto al año pasado.
En uno de los puestos de reunión, junto a la línea de producción que suele haber en estas fábricas, había una serie de gráficos pegados en las paredes y uno se refería a este tema.
Mostraba, en forma de columnas, la evolución del ausentismo mes por mes en 2024 y le antecedía el promedio de todo el 2023.
Los números eran contundentes.
A lo largo del año pasado, el ausentismo fue de 7,3%, mientras que en los últimos meses se ubica en un promedio mensual del orden del 3,6%, décima más, décima menos.
Es decir, el ausentismo se redujo a la mitad.
La automotriz viene realizando un ajuste de personal importante desde el año pasado. Recién este año, el gremio de SMATA hizo pública la salida de unos 300 operarios, pero el número sería mayor.
Esta reducción se produjo por distintas vías. Retiros voluntarios, jubilaciones anticipadas o recorte de personal con legajos “sucios”, como se llama en la jerga gremial a los trabajadores con algún problema disciplinario.
Arodarpost preguntó – advirtiendo previamente que iba a hacer un consulta “antipática” – cómo se logró la baja del ausentismo de forma tan drástica y en tan poco tiempo.
Obviamente, es un tema delicado y las respuestas en estos casos son políticamente correctas. Más si quien responde no es el directivo destinado para hacerlo y su función, como director de planta, pasa por otro lado. Es entendible.
Por eso, este medio se reserva el contenido del diálogo que se mantuvo.
Más allá de esto, la conjetura corre por la especulación periodística.
Una baja tan marcada del ausentismo debe haber estado relacionado con la salida de una cantidad importante de personal que, por distintos motivos, subían el promedio. Posiblemente, estos casos deben haber sido llamados por la oficina de Recursos Humanos para encontrar una salida acordada.
También es posible – seguramente fue así – la empresa implementó alguna política de mayor control y eficiencia para bajar el número de personal que no concurría a trabajar. Las licencias médicas, en un plantel de 3.000 trabajadores, deben ser numerosas.
Pero no parecería ser el principal motivo que explique esa mejora en la presencialidad.
También es cierto, como comentó un colega con mucho sentido común, el ajuste de personal debe estar funcionando como un «mensaje» para los trabajadores que siguen en la empresa. No hay espacio para rebeldías laborales.
Con este nivel de ausentismo, en el orden del 3,6%, planta de Volkswagen Argentina se puso en valores internacionales o, incluso, mejor que plantas como la de Brasil, México y – llamativamente – China.

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