El Gobierno tiene listo el decreto para realizar un nuevo llamado a licitación para otorgar el cupo de importación de autos híbrido o eléctricos sin arancel extrazona de 35%, correspondiente a 2026.
La medida se conocerá en los próximos días y habilitará a las automotrices agrupadas en ADEFA y a las empresas importadoras de CIDOA a ingresar al país 50.000 vehículos con el beneficio arancelario.
Ese volumen se repartirá en partes iguales entre los asociados a ambas entidades. Es decir, 25.000 podrán ser importadas por miembros de ADEFA y otras 25.000 por los de la cámara de importadores.
Se estima que, una vez realizado el llamado, las empresas tendrán plazo hasta el 15 de octubre para presentar sus pedidos de importación.
La medida se implementó a comienzos de año y ya otorgó el cupo correspondiente a 2025 también de 50.000 unidades. Las marcas que solicitaron participar de este sistema ya están comenzando a ingresar los vehículos, aunque tienen plazo hasta enero próximo para concretar toda la importación.
Para el nuevo llamado, el plazo para importar los 0km será hasta enero de 2027.
Que se realice ahora esta segunda adjudicación tiene que ver con un pedido de las empresas que solicitaron mayor tiempo para realizar el proceso debido a que deben pedir a las automotrices del exterior la producción de la cantidad de unidades solicitadas, éstas se tienen que fabricar, luego embarcar y recién después sacarlas del puerto. Toda la operatoria puede demandar más de seis meses.
El objetivo de la medida lanzada por el Gobierno es el de generar mayor competencia y reducir los costos de importación para que presione al mercado a que se bajen los precios de los 0km.
Si bien todavía no se sintió el efecto a pleno (la mayoría de los autos que se solicitaron importar en la primera convocatoria recién están entrando al país), hay señales que muestran que la oferta de vehículos, con alto nivel de equipamiento y más modernos, se están comenzando a ofrecer a precios más competitivos.
El sistema beneficia, especialmente, a marcas chinas que son las que tienen mayor variedad de productos con esta tecnología a precios más bajos.
No es casual que en el cupo correspondiente a los representantes de marcas importadas, BAIC y BYD hayan concentrado la mayor parte de los pedidos. Ahora se sumará también Chery que cambió de manos y hoy está siendo representada por el Grupo Corven.
Se espera que este segundo llamado, con mayor tiempo de planificación, profundice la tendencia de baja de precios.
De hecho, en las automotrices tradicionales reconocen que la medida las está obligando a ajustar su política comercial por esta nueva competencia.
Es cierto que esta segunda licitación se producirá en un contexto económico y político de mayor incertidumbre. Este es un tema clave ya que la importación está atada al dólar y los empresarios están atentos a lo que puede pasar con el tipo de cambio después de las elecciones.
En el pliego de licitación las empresas deben anticipar a qué precio venderán el vehículo que importan y cualquier salto cambiario haría que se modifiquen los márgenes y la rentabilidad.
Un empresario que participó de la primera licitación anticipó a A Rodar Post que será ´´más cauteloso´´ a la hora de definir cuántos vehículos va a solicitar importar para 2026, mientras que otro empresario aseguró que va a pedir todo lo que pueda. ´´Hoy se puede importar. No sabemos si dentro de dos o tres años vamos a poder seguir haciéndolo con la misma liberta«, dijo.
Esto muestra que hay una visión distinta en cada empresa respecto cómo enfrentar este escenario más incierto.
El otorgamiento del cupo se hará privilegiando a las empresas que ofrezcan los precios más bajos y se estima que, esta vez, se agotará en el primer llamado. En la licitación ya realizada se tuvo que hacer dos convocatorias porque en la primera no se cubrió el cupo de 50.000 unidades.