Por Horacio Alonso
Con el tema tan caliente del precio de los autos hay un reclamo generalizado de la gente que se escucha cada vez con más fuerza: “¡abran las importaciones!”.
Esta medida, al parecer, vendría a ser la solución para bajar el valor de los 0km.
Como expliqué en una nota de ayer – para la desilusión de muchos – las importaciones ya están liberadas. Desde diciembre no hay más trabas burocráticas. El problema que impide que lleguen en cantidad vehículos del exterior pasa más por lo financiero. También, obviamente, lo impositivo. Con la presión fiscal y la obligación de autofinanciar una importación por el plazo de 180 días, no es tan negocio importar autos.
El otro reclamo que muchos seguidores de X hacen es el de habilitar la importación de autos por particulares. Es decir, que el que quiera pueda importar un auto por su cuenta.
Otra vez voy a ser aguafiestas: hoy está permitido que cualquier persona importe un auto.
No depende de una fábrica o de un distribuidor oficial. Es libre de hacerlo.
¿Por qué no se hace?
En parte, debe ser por desconocimiento. También porque no es sencillo por cuestiones técnicas y, hasta diría, porque tampoco termina siendo tan buen negocio.
Estas son suposiciones. Lo importante es que no está prohibido.
Hablé con un empresario de una automotriz, con larga experiencia en el sector automotor, que me contó cómo es el tema en realidad. También consulté a un importador y confirmó que existe la posibilidad de hacerlo, aunque con algunos reparos.
Explicación
Acá va el diálogo:
A Rodar: ¿Se puede o no importar un auto por su cuenta?
Empresario:Totalmente. Cualquier persona puede importar un auto. La única restricción que hay es que el vehículo tenga la LCM aprobada (Es la Licencia de Configuración de Modelo que deben obtener los fabricantes de vehículos para poder vender. Es una homologación de cuestiones técnicas, emisiones y seguridad). Si tiene la LCM se puede importar de cualquier origen.
Importador: Sí, pero no es fácil conseguir la LCM. Si te querés traer un auto que no está homologado en la Argentina, la fábrica no te la cede. Te va a poner reparos. Y los que están homologados, difícilmente te lo vendan en otro país porque van a decir que ya tienen una filial en la Argentina. Que lo compres acá. Pero si se consigue la LCM, se puede importar.
AR: Yo pensé que no estaba permitido.
I: Legalmente, se puede. Técnicamente es muy complicado.
AR: ¿Se puede importar de cualquier origen?
E: Mientras esté homologado, sí. De Brasil, de México, de extrazona. No hay ninguna normativa que impida a un particular importar un auto nuevo. Usados no se puede.
AR: ¿Cuál es el costo de importación?
E: El particular paga lo mismo que un importador. Si viene del Mercosur no paga arancel. De México, lo mismo. Si viene de extrazona tiene que pagar el 35%. A eso hay que sumarle el IVA, la tasa de estadística, el impuesto PAÍS, Internos, etc. Todo lo que paga cualquier terminal. El particular tiene a favor que no se tiene que hacer cargo del costo de sacar la LCM. Ya lo pagó la automotriz.
AR: ¿Si es así, por qué la gente no importa los autos?
E: No lo sé. Puede ser por desconocimiento. También porque no debe ser fácil toda la operación. Hay que buscar el auto, hacer montones de trámite, ver cómo traerlo. No sé. No debe ser sencillo y, tal vez, no se justifique la diferencia económica. Cada tanto entra algún auto importado por un particular, pero es algo muy puntual. Hay algunos casos que se hicieron conocidos. Alguien que importó modelos de altísima gama. O de algún modelo que acá no está. Pero de forma masiva no se hace.
AR: ¿Lo de alta gama es porque ahí se puede hacer diferencia?
E: Puede ser. En algún momento hubo bolseros que traían autos para particulares. Ellos hacían la intermediación. Iban por el mundo y buscaban autos determinados, de modelos muy especiales, que traían. Eso pasó mucho en los 90. A comienzos de esa década.
AR: Sí. Me acuerdo que Cavallo, cuando era ministro, le decía a la gente que se importara su propio auto para que acá bajaran los precios. Alentaba la competencia. Daba el ejemplo del precio de la Chevrolet Lumina en Estados Unidos y cuánto podía costar ponerla en la Argentina.
I: Claro. Me acuerdo también. Ya desde entonces se podía y hoy también se puede.