¡Qué interesante que se está poniendo el mercado automotor! Con la apertura económica la oferta de modelos está creciendo. Después de varios años de desabastecimiento, el consumidor comienza a poder elegir entre nuevas opciones. El segmento de las pick-siempre fue competitivo, pero cada día se profundiza más esa tendencia. Con el cepo al ingreso de productos del exterior, llegó a representar el 25% de las ventas. La falta de SUV volcó la demanda a su favor. Hoy se acerca más al 15%, pero en un mercado que crece fuerte (70% respecto a 2024), el volumen de operaciones sigue siendo elevado y atractivo para las marcas. Además de las clásicas «chatas» nacionales se suman modelos que buscan ganar su espacio. Hay propuestas para casi todos los gustos. ¿Todavía faltan más? Seguramente, pero se va por un buen camino
1 – Al hablar de pick-ups, Ford es una marca referente de peso. Es la automotriz que tiene la oferta más amplia en el país. Además de su emblemática Ranger de producción nacional completa la gama con varios modelos importados. Está presente en el segmento de full size, mediano y compacto con opciones con motorización tradicional o hibrida. Hace unos meses renovó la familia de Maverick y sumó la versión Tremor pensada para el off road, pero que no desentona en el ambiente urbano. Llega importada desde México.
2 – La renovación estética se centra, principalmente, en la parte frontal, con un sistema de luces que redujeron su tamaño y le cambia la cara. Su espacio lo ocupa una extensión de la carrocería que me mete hacia arriba. Una solución bastante rupturista. La otra modificación importante es la desaparición el spoiler delantero que le quitaba ángulo de ataque. Ahora se remplazó por un paragolpe clásico que deja más espacio, en relación con el suelo, lo que evitará golpes innecesarios cuando se anda en zona de pozos. En esta versión, se ven detalles de color naranja en distintos lugares de la carrocería, como las letras que conforman la palabra Tremor. El resto mantiene la imagen que hace reconocible a una Maverick, con ángulos más rectos, robusta y hasta con un toque de rusticidad. Las llantas oscurecidas, los neumáticos All-Terrain y los ganchos para remolque le acentúan el estilo aventurero. La caja tiene revestimiento plástico, buenos anclajes, tomacorriente de 120 voltios e iluminación superior.
3 – En el interior se percibe un ambiente de confort y de buena calidad, como hace tiempo ofrecen las pick-ups pensadas para un uso más de esparcimiento- Los detalles de color naranja, identificando a la versión, se repiten en distintos lugares como el tapizado o el volante. Tiene un tablero digital de 8 pulgadas y una pantalla multimedia táctil de 13,2 pulgadas y lo novedoso es que llega con techo corredizo. Eso hace que la cabina pueda ganar en luminosidad. Hay bastantes espacios para guardar objetos. Algo bueno para un vehículo que va a andar a los saltos. Las plazas traseras están pensadas para tres pasajeros y la comodidad dependerá de contextura de cada uno. Tienen puerto USA y toma corriente de 120 voltios. Es una pick-up compacta. No hay espacio para tirar por el aire, pero está bien.
4 – Mantiene el motor Ecoboost 2.0 turbonaftero que entrega 253 caballo y 375 Nm de torque, acoplado a una caja automática de ocho velocidades y tracción integral 4×4 con bloqueo.
5 – Si bien la Maverick Tremor es un modelo pensado para el off-road no se limita a eso. Al ser compacta, permite su uso urbano sin dificultad. El que elija una pick-up mediana o full size, por necesidad de mayor espacio o por gusto, se va a encontrar con todas las contras que puede haber en un ámbito que no es el natural. Dificultad para moverse en el tránsito, conseguir lugares para estacionar, un manejo más pesado. En cambio, la Tremor ofrece prestaciones off-road como la mayoría de sus hermanas mayores, pero se mueve como un auto. Para mí. Cierra perfecto y a menor precio. Es ágil, liviana y con un esquema de suspensión muy eficiente en todos los terrenos. La potencia del motor se siente cuando se la acelera a la salida de un semáforo. Tiene levas en el volante para el que quiera decidir los cambios. Lo mismo sucede cuando se sale a la ruta. El confort de marcha es muy bueno. Uno se olvida que está en una pick-up. La única desventaja es que con unos neumáticos pensado para manejar fuera del asfalto, cuando se está en la ruta se siente una mayor aspereza, pero nada tortuoso. Se convive sin problema con ese sonido de fondo. Tuve oportunidad de manejarla en viaje a Balcarce, con escala en Mar del Plata, para participar de un evento. Se la siente firme y confortable. Un tanquecito. Con muy buena respuesta en las maniobras de sobrepaso y estable en las curvas. Pasando la localidad de Dolores, por la Ruta 2, se largó una tormenta bien fuerte. De esas que el limpiaparabrisas tiene que trabajar al máximo. Con un auto, aún de alta gama, el trayecto habría sido menos placentero. El viento y los charcos que se forman en el asfalto hubiesen sido una molestia grande. Siempre le agregan una dosis de tensión al conductor. Me alegré de andar en una Tremor. Parecía imperturbable y tenía la confianza de que también en estos casos la tracción integral es más que útil. Sólo tuve que subir más el volumen de la música que iba a escuchando y disfrutar el viaje.
6 – Sin duda, el fuerte de esta Maverick está en su desempeño off-road con mucha tecnología para que el que le quiera sacar frutos lo pueda hacer. Potencia le sobra y al ser una pickup compacta tiene la ventaja de ser más liviana y moverse con más soltura. La tracción integral le va a permitir al conductor menos experimentado animarse al barro, la arena o la nieve sin complicaciones y con seguridad. En esto siempre es bueno aclarar que el vehículo no hace todo solo. Una parte la pone la capacidad del conductor. Intentar ir a terrenos extremos sin conocimiento es una imprudencia, pero hay muchas situaciones que se pueden presentar en viajes que la Tremor va a hacer parecer como experto a quienes no tienen mucha experiencia fuera del asfalto. Camino a Balcarce y con tiempo de más para llegar al evento, aproveché para meterme por caminos rurales. Era un día con una llovizna continua, así que barro sobraba. La Tremor surfeaba el terreno, de un lado para el otro, y la mecánica se encargaba de todo. Poco tenía que aportar yo, más allá de pequeñas correcciones con el volante. Apenas se sentía que empezaba a patinar, la pick-up se movía hasta encontrar adherencia y tomar impulso. Como cuenta con un sistema especial para el manejo off road – el Tremor Advance 4WD o el One Pedal Trail Control – lo que se puede hacer con este vehículo va mucho más allá de situaciones como esta. El conductor puede desconectar las ayudas electrónicas y tener en sus manos el control del vehículo, pero no todos saben o quieren conducir de esta forma. Posiblemente, la mayoría de la gente prefiere confiar en la tecnología y sentirse más seguro.
7 – En cuanto al consumo, en ámbito urbano ronda los 14 litros cada 100 kilómetros. Los caballos se sienten, pero el número dependerá de cómo se maneja. En ruta queda por debajo de los 8 litros.
8 – En materia de seguridad cuenta con un buen equipamiento de base y, con este restyling, la Maverick Tremor suma una seria de asistencias para la conducción que le dan un salto de calidad. Cuenta con frenado autónomo de emergencia que también se activa cuando se maneja marcha atrás, sensor de mantenimiento de carril, control crucero adaptativo (cada vez me gusta más) y ayuda para la conducción con remolque.
9 – El equipamiento de confort es completo con dos puntos a favor. La Maverick incorpora el sistema FordPass, la aplicación que permite manejar numerosas funciones del vehículo desde el celular, ofrece asistencia on line e internet 5G. Es un servicio gratuito. El otro dato positivo es que la rueda de auxilio es igual a las que calza. Es una buena noticia a la hora de emprender un viaje.
10 – La Ford Maverick Tremor cuesta $58.277.300 y una garantía de tres años o 100.000 kilómetros. (Ver ficha técnica y equipamiento).