Desde la compra de Mercedes-Benz, el grupo local Prestige le está imprimiendo a la marca un mayor dinamismo. Hay que reconocer que los últimos años de la gestión alemana no fueron los mejores y dejaron a la automotriz en un estado casi ´´vegetativo´´. El nuevo presidente de la automotriz – el ex Toyota, Daniel Herrero – inició su gestión tratando de sacar a la empresa de esa situación de letargo. Además de los proyectos para la Sprinter, que producen en la planta de Virrey del Pino, también se busca refrescar la gama de productos, tanto en el segmento de los autos premium como en el de utilitarios. Por ese motivo, Prestige ya empezó con lanzamientos de modelos que se irán ampliando con el correr del tiempo
1 – Tras cinco años de no tener presencia en el mercado, Prestige reinició la venta del utilitario Vito en dos configuraciones importadas de España: La versión Tourer, para pasajeros, y el Furgón Mixto, pensado para el trabajo. En realidad, las dos pueden tener como destinatario el uso familiar. Nada se lo impide. Podría ser una familia muy numerosa que opte por una van de 10 plazas o una familia estándar, pero que busque gran capacidad de carga. Tuve la oportunidad de manejar las dos versiones, una seguida de la otra, lo que es muy útil para comparar.
2 – Las Vito Tourer y Mixto mantienen la imagen de un utilitario compacto. La versión de pasajeros se distingue por una mayor elegancia que le brindan los detalles cromados, los faros LED y las llantas de aleación. Es un poco más larga que el furgón (5.370mm vs 5.140m) y con mayor distancia entre ejes. También se diferencia en que la Tourer tiene portón de acceso a las plazas traseras de ambos lados y con apertura y cierre electrónico, mientras que el Mixto sólo tiene un portón de lado del acompañante y es de apertura y cierre manual.
3 – En el interior está presente el carácter premium del modelo con materiales de buena calidad y muy confortable. No son para nada rústicas por tratarse de un vehículo utilitario. La posición de conducción elevada brinda una muy buena visibilidad. Cuenta con tablero analógico, computadora de a bordo, volante multifunción y pantalla multimedia. En el caso de la Tourer suma volante revestido en cuero y climatizador para las plazas traseras. Tiene una capacidad para nueve pasajeros más el conductor y cuatro filas de asientos en formato 2-3-2-3. El acceso a las plazas traseras es fácil. Al tener cuatro filas de asientos, la capacidad de carga interior es mínima. Es un vehículo pensado para traslado de ejecutivos, turistas o cualquier grupo de personas, pero sin equipaje. No hay espacio para bolsos. En cambio, la versión Furgón es para cinco pasajeros con gran capacidad de carga.
4 – La motorización no es la misma en las dos versiones. El furgón está equipado con un motor de 2 litros turbodiésel de 136 cv y 330 Nm de torque, mientras que la Tourer tiene una potencia mayor: 190 cv y 440 Nm. Sí comparten la misma transmisión automática 9G-Tronic de nueve marchas. Ambas cuentan con tracción trasera.
5 – La experiencia de manejar vehículos de este tipo, de gran porte, es diferente a la de un auto o un SUV, incluso grande. Tampoco se parece al de una pick-up. La respuesta del motor es distinta y eso hace que sus movimientos sean diferentes. Lo primero que hay que acostumbrarse es al tamaño. Hay que tener cuidado de no calcular mal. Por suerte, no tuve problemas. A los pocos minutos ya estaba adaptado a sus dimensiones. La posición de manejo alta otorga una gran visión. No es como manejar un colectivo, pero hay algo de eso. ¿Son pesados? Para nada. Se mueven con mucha agilidad y, de a poco, uno se va olvidando que está en un utilitario. Tienen un andar confortable y la diferencia de potencia del motor no es algo que se note. En los dos casos sentí que respondían muy bien. Hay que tener en cuenta que el manejo de estos vehículos no busca respuestas extremas ni deportivas. Le sobra potencia para mover un utilitario de este tamaño. Está muy bien. La suspensión me gustó más en autopistas o ruta y me sorprendió lo bien que trabaja en caminos de ripio o tierra. En un asfalto con irregularidades y algunos pozos sentí que le faltaba un poquito de confort. Esto es muy personal. De todas formas, es algo muy sutil. Lo que me gusto mucho es el radio de giro de la dirección asistida. Dobla en espacio reducido. Para mi gusto y tratándose de una marca premium, le faltaría el espejo retrovisor central con cámara trasera. Es decir, que replique en el espejo lo que capta la cámara y no depender de la visión del espejo clásico. Muchos modelos ya lo traen. En la versión Tourer, entre la cantidad de asientos y pasajeros, apenas se puede ver para atrás. Hay que depender de los espejos retrovisores externos. En el caso de furgón, si se lleva una carga alta, sucede lo mismo. Es cierto, que no son vehículos de lujo, pero la marca sí lo es y sería bueno este equipamiento. Igual, con el correr de los kilómetros uno se acostumbra. En el caso del estacionamiento, los sensores y cámaras que tiene son muy útiles y no es tan complicado estacionar. Otra cosa de la que hay que acostumbrarse es la ubicación de la palanca para accionar el cambio de marcha. En los Mercedes-Benz está detrás del volante (en el lugar habitual que va la palanca del limpiaparabrisas en otros autos) y no en la consola central. Más de una vez, en un par de días de lluvia que me tocó, pasé de D a N cuando quise accionar el limpiaparabrisas.
6 – Más allá del manejo, en vehículos como estos, es importante la funcionalidad. En el caso de la Tourer, el espacio interior para los pasajeros, el cómodo acceso a las últimas plazas y el confort y la calidad del interior hace que viajar sea muy placentero. Hice un pool con seis adolescentes (mi hija y cinco amigas) y pasaron muy bien. Me pedían seguir hasta la costa atlántica. El furgón ofrece una capacidad de carga enorme, tanto sea para el trabajo (una pyme o un emprendedor) como para uso familiar o de esparcimientos. Los pasajeros van a viajar con gran confort. Es cierto que cuando uno se acostumbró a la comodidad de los dos portones traseros con apertura eléctrica de la Tourer y se pasa a la versión Mixto, con una sola salida lateral y de accionamiento manual, se nota el cambio, pero es lo único verdaderamente notorio en cuanto a confort entre una versión y la otra.
7 – El consumo urbano ronda los 9 litros cada 100 km en el Mixto y un poquito menos la Tourer. A 120 kilómetros por hora baja a unos 8 litros. Todo depende de la forma de manejar. Según las especificaciones oficiales, el consumo promedio es de 7.1 litros.
8 – El equipamiento de seguridad del furgón Mixto cuenta como principales elementos con airbags para conductor y acompañante, ABS, ESP, asistente de arranque en pendiente, alerta de punto ciego, Isofix, asistente de alerta de cansancio, cámara de marcha atrás y freno a disco en las cuatro ruedas (ver ficha técnica). La versión Tourer adiciona paquete de estacionamiento con cámara 360 grados, airbags laterales y de cortina, monitoreo de presión de neumáticos, freno de emergencia, asistente de viento lateral (ver ficha técnica)
9 El equipamiento de confort del Mixto incluye espejos retrovisores calefactables con control eléctrico, cierre centralizado con control remoto, conectividad Apple CarPlay y Android, cargador inalámbrico, levantavidrios eléctrico one touch, sensores de estacionamiento, entre otros. La versión Tourer suma aire acondicionado y calefacción en plazas traseras, espejos retrovisores plegables electrónicamente, volante revestido en cuero, entre otros.
10 – El precio del Vito Mixto es de u$s64.437 y el del Tourer Pro u$s80.000. La garantía es de 3 años sin límite de kilometraje.





